Crecer con una madre muy centrada en lo natural me ha influenciado bastante: Ella casi nunca utilizaba el plástico, yo era la niña con el almuerzo en una bolsa de papel. Mis galletas de chocolate tenían semillas de girasol y nueces. Tampoco usaba nunca teflón… usaba sartenes de hierro fundido. No se teñía el pelo, lo dejaba gris y siempre parecía tan bellamente natural… y sigue así. Ella no creía en la cirugía innecesaria y cuando yo tenía 12 años y me dijeron que tenían que extirparme mis adenoides y las amígdalas, me llevó a un naturópata que me puso una dieta especial sin lácteos, sin azúcar y sin trigo durante un año entero… algo bastante difícil para un niño de 12 años de edad. Pero ¡funcionó!
Así que, mi madre me contagió su pasión por lo natural – los alimentos, el cuidado de la piel y otros remedios. Y también el entendimiento de que nuestra salud viene de dentro, con la forma en que nos tratamos a nosotros mismos, nuestros cuerpos, nuestros corazones, nuestra piel. Buscar llegar a la raíz de las cosas en lugar de sólo enmascararlos. Cuando tienes dolor de cabeza, ¿simplemente tomas una pastilla? ¿O buscas su origen y lo que puedes hacer para que no vuelva a suceder?
Tenemos que tratar nuestra piel de manera integral también.
Consejos:
- En lugar de esperar hasta que tus labios se agrieten y parchear con un bálsamo labial hidratante, usa bálsamo labial en tu rutina, para que no lleguen a secarse.
- Bebe más agua.
- Usa jabón natural preferiblemente de aceite de oliva, ya sea en pastilla o líquido. Mi preferido es el jabón en pastilla, pero un buen jabón líquido natural también puede ser maravilloso para la piel. Si comienzas a cuidar tu piel lavando con jabón natural de aceite de oliva bien hecha, probablemente encontrarás que tu piel no necesitará tanta crema hidratante.
- Come menos alimentos procesados y consuma más frutas y verduras frescas.
- Utiliza un serum facial hidratante natural en la noche antes de acostarse y también verás que su rostro no necesitará tanta crema hidratante.
- Descansa y duerme lo suficiente.
- Haz ejercicio regularmente. Una crema o exfoliante especial puede ayudar a la celulitis, por ejemplo, pero quizás nada funciona tan bien como ejercicio, mejorar la circulación y una buena dieta.
- ¡Sonríe!